domingo, 18 de noviembre de 2012

Lo dicho


No puedo decir “te lo dije”,

no debo.

 

Puedo decir en cambio

“me lo dijeron”.

 No una, sino tantas veces.

Seguramente con buenas intenciones,

eso es lo que dijeron.

 

Puedo decir, también,

aunque tal vez tampoco deba,

que el único valor que tiene esa sentencia,

radica en la cantidad de veces

que es desatendida.

Memoria


Memoria

 

La única memoria creíble

es la memoria de la piel,

y la más precisa, la contundente,

es la memoria que nace, arrogante y todo,

de la piel que hay entre el pulgar y el índice.

 

Ese es el verdadero registro de la vida,

el verdadero reino del recuerdo,

el único onomástico creíble.

 

Ese es el destino y el calvario:

                                                     la única sentencia.
Escribimos nada más porque vivimos.

                                                               Juan Manuel Bonilla Soto



Imágenes del Primer Festival Artístico y Cultural en Fresnillo, Zacatecas.
Noviembre de 2012